"Los diarios titulan con encuestas que no se sabe ni de dónde son", señalan especialistas

Convocados por la UNTREF, Ramiro Fernández, Diego Brandy, Lucas Romero y Mora Jozami, expertos en consultoría y opinión pública, disertaron sobre la vigencia de las encuestas. Los medios de comunicación y las redes en el medio del problema.

12-10-2023

Cuatro especialistas en opinión pública y encuestas se reunieron el lunes 9 de octubre en la Sede Rectorado Centro de UNTREF para debatir sobre la vigencia de las encuestas electorales, con la pregunta “¿Por qué fallan las encuestas?” como eje ordenador. El Lic. Ramiro Fernández Vizcaychipi (GCBA), la Lic. Mora Jozami (Especialista en Investigación en Opinión Pública), el Lic. Diego Brandy (CINEA – UNTREF) y el Lic. Lucas Romero (USAL) compartieron sus experiencias y perspectivas sobre la situación actual.

Presentados por la Lic. Celina Curti (UNTREF), cada uno de los cuatro especialistas disertó durante 20 minutos y luego se dio lugar a una serie de preguntas moderadas por el Lic. Nicolás Cha (UNTREF). La actividad, organizada por la Licenciatura en Estadística y Ciencia de Datos y la Maestría en Generación y Análisis de Información Estadística,  se propuso adelantarse al típico debate post elecciones, donde cada uno de los canales de comunicación esgrime sus teorías y pareceres acerca del porqué de la brecha entre las encuestas y los resultados concretos de una elección.

En este sentido, Mora Jozami se mostró tajante frente a uno de los prejuicios acerca de la generación y análisis de encuestas más difundidos: "Encuestar no es preguntar". Así, la especialista en investigación en opinión pública acusó a los diarios de titular “con encuestas que no se sabe ni de dónde son".

“Es un tema que genera mucho interés y más en esta época preelectoral”, dijo la especialista. Pero advirtió que esto no justifica publicar datos sin cotejarlos o explicar las metodologías que se utilizaron para llegar a ellos, así como de dónde se sacó la muestra o cómo está compuesta, entre otras particularidades. “Hay mucho camino por andar en la educación a periodistas en la lectura de encuestas y en la interpretación de los datos”, concluyó.

Diego Brandy también se manifestó acerca de estos prejuicios: “Las encuestas electorales no son encuestas de opinión”. Además, se aventuró a cuestionar el lugar de las redes sociales y los medios masivos de comunicación en la generación de opinión pública, así como en la difusión de resultados de encuestas. “Pronosticar una conducta tiene una complejidad importante”, dijo Brandy, quien agregó que aunque “la gente puede mentir y tiene derecho a mentir”, más aún los encuestadores tienen la obligación de “gestionar esa mentira".

Fernández Vizcaychipi, por su parte, declaró: “Las encuestas están más vigentes que nunca”. “Entrás a cualquier portal de noticias y ves notas sobre encuestas", dijo y ejemplificó: “Las notas con más clics en Clarín son las notas sobre encuestas”. El especialista en consultoría del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires reivindicó la vigencia de las encuestas porque “no son sólo elementos de predicción, sino que también son herramientas de marketing y campaña”.

Lucas Romero, director de la investigadora de opinión pública Sinopsis, concentró su disertación en la problemática de atención que se vive en la modernidad con la masividad de las redes sociales y el valor de la inmediatez que propician. “La atención se ha vuelto un recurso escaso”, dijo el consultor. Esto dificulta la obtención de datos para encuestas tanto en cantidad como en calidad. Por otro lado, explicó que los votantes actuales “se sienten menos identificados con los partidos políticos”, que “son electorados muy volátiles” y que “pueden cambiar de voto a último momento”, lo que obliga a “medir hasta el último minuto”.

A modo de conclusión, en la ronda de preguntas, los especialistas coincidieron en el obstáculo que representa que los jóvenes no estén dispuestos a realizar encuestas. “Es muy difícil hacer que los jóvenes contesten, no contestan ni el teléfono”, explicó Romero. En este sentido se advirtió acerca de la urgencia que representa poner en valor la obtención de datos, en cantidad y calidad, con fuentes pertinentes y voluntarias. “Va a llegar un momento donde ni le preguntemos a la gente la información sino que directamente se la saquen”, se aventuraron a predecir los expertos pensando en los manejos de big data, inteligencia artificial y algoritmos de redes sociales.

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