Crisis económica: la Argentina decrece en una región que intenta prosperar
Se llevó a cabo la primera jornada del Seminario de Pensamiento Económico Argentino, un encuentro en el que se analizó la situación económica nacional en relación con el resto de la región.
20-05-2024
El contraste actual entre la economía argentina y la del resto de Latinoamérica fue el centro de los debates del primero de los seis encuentros de la nueva edición del Seminario de Pensamiento Económico Argentino, organizado por el Centro de Investigación y Docencia en Economía para el Desarrollo (CIDED) y por el Instituto Interdisciplinario de Economía Política – IIEP (CONICET-UBA). Fue transmitido en vivo por el Canal de YouTube de la UNTREF.
El evento contó con la participación y exposición del Licenciado en Economía del Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES) Martín Rapetti, del especialista en Desarrollo Económico Andrés López y de la Licenciada en Economía Roxana Maurizio, estos dos últimos de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Observaron que el escenario presente difiere de épocas no tan lejanas, cuando el crecimiento regional impactaba en el local. Según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en 2024 la Argentina experimentará una caída del 3% en su Producto Bruto Interno (PBI), mientras que la región se expandirá un 2.1%.
La exposición de Rapetti estuvo dividida en etapas históricas. “Si analizamos la situación económica y el desarrollo de los países de la región desde la década de 1950 hasta la del 2000, observamos que no existen grandes diferencias. Sin embargo, si hacemos un corte en un tercer período que llegue a nuestra actualidad, veremos que los senderos se bifurcan y algunos países experimentan crecimiento y otros, en especial la Argentina, un retroceso”, dijo. El invitado del CEDES demostró, a partir de un gráfico basado en fuentes del Fondo Monetario Internacional (FMI), que la Argentina y el resto de la región no diferían demasiado en las etapas que van desde 1950 hasta 1972 y desde 1973 hasta 2004. Esto cambia radicalmente en un último escenario que empieza en 2005 y llega hasta el año 2023, cuando nuestro país experimenta una inflación interanual superior al 211%, mientras que otros países, como Uruguay y Chile por ejemplo, registran 5% y 3.9%, respectivamente.
Al igual que Rapetti, Maurizio exhibió su presentación a partir de etapas bien delimitadas. La investigadora de la UBA basó su ponencia en cuestiones vinculadas con el mundo laboral y la evolución e involución de las condiciones de trabajo en los últimos 30 años. Desde 1994 hasta 2002 hay, sostiene, un debilitamiento de las instituciones laborales y un aumento de la informalidad y de la desigualdad; desde 2003 hasta 2014 esta situación se revierte y se genera una reducción en la desocupación y la desigualdad, a la vez que comienza un proceso de formalización laboral. Luego desde 2015 hasta 2019 se destaca un panorama laboral complejo y una ralentización en las mejoras; finalmente una generalizada caída de los ingresos reales en la etapa que abarca desde2020 hasta 2023. “Hoy vemos que la informalidad laboral ha crecido muchísimo. Podríamos decir que la mitad de los ocupados son trabajadores formales y la mitad informales”, sostuvo. Además, la especialista señaló: “Una de las singularidades que presenta la Argentina es que actualmente una gran cantidad de trabajadores cayeron bajo la línea de la pobreza. Es decir que creció el índice de personas que, pese a tener trabajo, están por debajo de la línea de la pobreza”.
Finalmente, Andrés López indicó que es prioritario, “primero y antes que nada”, definir qué significa que un país es desarrollado y destacó que “todos los países pobres se parecen ya que viven situaciones homogéneas, mientras que los países ricos son un conjunto bastante heterogéneo. Tenemos países como Luxemburgo, Irlanda, Qatar y Noruega que entre sí son bastante diferentes”, expresó. En este sentido, se preguntó si todos los países ricos son desarrollados: “Qatar es un país extremadamente rico pero ¿podemos decir que es desarrollado si analizamos, por ejemplo, cuestiones vinculadas con la ideología de género?”, interrogó el especialista. A pesar de esta inquisición, el expositor invitado precisó que desarrollo y crecimiento económico van de la mano ya que, en general, son los países más ricos los que tienen un mayor nivel de desarrollo social y pueden elaborar mejores estructuras de salud y educación, algo que impacta positivamente en la calidad de vida de la comunidad. Por último, consideró que la diversificación productiva es clave. “Los países más ricos son los que tienen una estructura diversificada y altos niveles de complejidad económica. Se trata de diversificar la economía para no depender únicamente de los recursos naturales ya que se ha visto que los países que dependen de esta única variable no son los países ricos”, expresó. Además remarcó que a esta diversificación hay que sumarle una mayor inversión en Investigación y Desarrollo (I+D). “Se trata de que los gobiernos elaboren una agenda en la que la transformación productiva sea una prioridad”, concluyó.
Esta actividad abierta a la comunidad continuará hasta fines de julio, martes de por medio, en el horario de 17:00 a 19:00 horas. La próxima charla tendrá lugar el 27 de mayo y contará con la presencia de la investigadora del Banco Mundial Mariana Conte Grand y de la economista de la UBA Verónica Gutman. Quienes estén interesados en participar del evento pueden inscribirse a través del siguiente enlace.